Margaret Rand explora la Denominación de Origen Toro

El reciente viaje de Margaret Rand a la Denominación de Origen Toro ha causado cierto revuelo en el mundo vinícola, no solo por su reputación como escritora y sumiller de renombre, sino también por la profundidad de su investigación en una de las zonas vitivinícolas más destacadas de España. Durante su estancia, tuvo la oportunidad de visitar Quinta de la Quietud, un nombre que resuena con eco entre los amantes del buen vino por su compromiso con la viticultura ecológica y sus prácticas innovadoras en la elaboración de vinos.

Toro, conocido por sus tintos potentes y profundos, ha sido un destino obligado para muchos expertos en vinos, pero la visita de Rand no fue una mera formalidad. Durante una semana intensa, cató cerca de un centenar de vinos, un maratón enológico que le permitió comprender las capas de complejidad y la diversidad que ofrece esta región. La elección de Quinta de la Quietud para una visita más detenida no fue al azar. Este lugar no solo capta la esencia de Toro sino que también destaca por su enfoque en la sostenibilidad y la innovación.

Juan Carlos Rodríguez, director de la bodega, y Jean-François Hébrard, el enólogo, fueron los encargados de mostrarle el alma detrás de sus vinos. La visita también contó con la presencia de Rubén Gil, gerente y secretario del Consejo de la Denominación de Origen Toro, lo que subraya la importancia de este encuentro no solo para Quinta de la Quietud sino para toda la región.

Los vinos de Quinta de la Quietud son el resultado de un meticuloso trabajo que busca no solo preservar la identidad del terroir de Toro, sino también innovar dentro de los parámetros de la ecología y la sostenibilidad. Rand tuvo la oportunidad de catar cinco de sus referencias, destacando dos que, por su originalidad y calidad, captaron especialmente su atención: InQuietud by Nature, un vino natural que refleja la filosofía de mínima intervención de la bodega, y La Dulce Quietud, un blanco elaborado con uvas blancas pasificadas que ofrece un contraste refrescante frente a los robustos tintos de la región.

Estos vinos, en palabras de Rand, no solo son ejemplos de la excelencia que puede alcanzarse cuando se respetan los ciclos naturales y se cuida cada detalle en la viña y en la bodega, sino que también son embajadores de la D.O. Toro, mostrando que la innovación y la tradición pueden coexistir armoniosamente.

La visita de Margaret Rand a Quinta de la Quietud es un testimonio de la evolución constante de Toro como región vitivinícola y del interés creciente por parte de expertos internacionales en explorar más profundamente sus vinos. Con cada copa y cada bodega que se descubre, Toro continúa fortaleciendo su posición en el mapa mundial del vino, invitando a paladares de todo el mundo a explorar sus riquezas. La crónica de esta visita seguramente será un referente en TimAtkin.com, ofreciendo a los aficionados y profesionales del vino una mirada íntima a la pasión y el arte que define a Quinta de la Quietud y a la región de Toro.